Los rumores en el Club América no se detienen, apenas se logró el bicampeonato de la Liga MX y ya se está pensando en lo que sigue, pero a diferencia de hace seis meses, ahora tendrán que hacerlo sin varios de sus futbolistas referentes en este año de gloria, o por lo menos así parece, pues junto a la baja confirmada de Julián Quiñones por algunos medios, se sumarían otras ya habladas desde hace meses, lo que afectaría claramente al grupo de André Jardine.
Cuando Jardine se convirtió en el director técnico de los Azulcremas, lo hizo llegando desde Atlético de San Luis, con muchas dudas encima por no ser el candidato número 1 a la silla de las Águilas. Incluso su debut fue con una desafortunada derrota en casa, pero poco a poco hizo que su equipo jugara de gran manera, con una propuesta ofensiva que no descuidaba la zona baja.
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Lo único que se le puede reclamar a Jardine es que no fue capaz de ganar la Copa de Campeones de la Concacaf, pero con la plantilla pudo levantar un bicampeonato que no es poca cosa. Sin embargo, ahora podría afrontar su mayor reto como estratega de las Águilas, particularmente en lo que respecta a la contratación de refuerzos para la siguiente temporada.
¿Andre Jardine tendrá voz y voto en los nuevos refuerzos?
Cuando Jardine llegó a América, se señaló que llegó a una plantilla que prácticamente estaba lista para ser campeona, de tal manera que hubo quienes demeritaron el trabajo de André. Por ello, ahora que todo apunta a que se irían hasta 10 elementos de las Águilas, el brasileño tendrá que demostrar que sí puede hacer un nuevo equipo capaz de coronarse campeón.
Lo primero que tendrá que hacer Jardine es definir junto con la directiva qué elementos interesan de acuerdo a los futbolistas que se vayan, tener en claro los perfiles que se van para tratar de asegurar a otros similares, ya sea de la misma Liga MX o del extranjero, priorizando que lleguen antes de que arranque la pretemporada para el Apertura 2024.
¿América puede armar un nuevo plantel para campeón?
Dejando de lado el discurso de ser permanentemente campeón, las Águilas tendrán una misión muy complicada si dejan ir a tantos futbolistas, puesto que si bien tienen los recursos para adquirir talentos importantes, también es una realidad que la plantilla actual ya se conocía desde hace mucho tiempo, por lo que todos sus movimientos eran comprendidos fácilmente en este certamen.