La situación actual del delantero parece empeorar, pues tras los videos que demostraron a un Raúl incapaz de realizar correctamente un ejercicio en las prácticas del Tri, la pieza inamovible del esquema de Martino anunció que abandonará la concentración por unos días.
A diez días de Qatar 2022, la incógnita de la presencia del atacante ya desató cuestionamientos, tanto para México como para su equipo, pues Wolverhampton permitió la vuelta de Jiménez a México, con intención de progresar en su recuperación.
Mediáticamente, las preguntas acerca de la demanda que tiene el entrenador argentino por el juego de Raúl, acaparan directo a la posibilidad de tratarse de patrocinios, contratos o publicidad en que el originario de Tepeji, estuviera involucrado.
El hecho está en que el goleador de los Wolves aún necesita realizar un viaje a Inglaterra para obtener el alta médica y, así, tener una posible aparición de cara al último partido amistoso de México, pero eso no asegura que, aunque se niegue su alta, Jiménez deje de ser uno de los principales para Gerardo Martino.
Independiente del talento y calidad que Raúl ha demostrado desde la llegada del Tata, las hipótesis por pérdida de dinero a causa de contratos o patrocinios que pudiera tener el mexicano quedan anuladas, ya que son situaciones negociables y a plazo fijo, considerables, aunque el jugador asista o no.