La afición del Club América es una de las más peculiares, no sólo dentro del Fútbol Mexicano, si no también en todo el mundo. La exigencia que se vive en el equipo más grande del país azteca, no se experimenta en ninguna otra institución, por lo cual convertirse en un ídolo de las Águilas, es una tarea que además de ser sumamente complicada, no sólo se trata de llegar, si no de saber mantenerse.
Hay varios casos de futbolistas americanistas que en su momento fueron de los consentidos de los aficionados, pero que por diversas circunstancias, terminaron siendo duramente criticados por los mismos. Ejemplos de este fenómeno puede ser gente como Oribe Peralta, Federico Viñas, Rubens Sambueza y más recientemente, el lateral derecho mexicano Miguel Layún.
La situación de Miguel en la institución de Coapa, ha sido sumamente especial, ya que no ha sido la primera vez que pasa de un extremo a otro, en cuanto a su simpatía con la afición del Club América. Layún llegó al primer equipo en el ya lejano año 2009, proveniente del Fútbol de Italia, pero levantando muchísimas dudas en sus primeros torneos con las Águilas.
No fue hasta el torneo Clausura 2013 (4 años después de su llegada), que se empezó a ganar el corazón de los aficionados americanistas, pero antes de esto, se hizo viral el famoso hashtag #TodoEsCulpaDeLayún, lo que deja en claro que no era uno de los favoritos de la hinchada. Sin embargo gracias a su esfuerzo y dedicación, Miguel fue pieza importante en la consecución de dos títulos para las Águilas, hasta siendo capitán en uno de ellos.
Aunque algunos ya no se acordarán, Miguel llegó a demostrar un nivel extraordinario con las Águilas entre el 2013 y 2014, convirtiéndose en uno de los mejores futbolistas de la Liga MX, lo que lo convirtió en uno de los referentes en Coapa. Su nivel lo llegó a jugar al Fútbol de Europa, en donde por momentos, llegó a mostrar un nivel más que destacado, teniendo de los mejores números para un lateral en el Viejo Continente.
Muchos esperaban que tras terminar su aventura europea, Miguel regresara al que muchas veces ha declarado es el equipo de sus amores, el Club América, pero al final no terminó ocurriendo así. Aquí entra el primer desencuentro de Layún con la afición americanista, su regreso a la Liga MX con Rayados de Monterrey, una situación que no hubiera llegado a más, si no fuera por sus polémicas declaraciones cuando ganó la final del torneo Apertura 2019, en donde ya comenzábamos a ver una versión diferente del futbolista en su forma de actuar.
En su regreso a Coapa, Layún hizo un importante sacrificio económico para volver a las Águilas, algo que pocos valoraron en su momento, pero que parecía podía volver a acercar a Miguel a la afición. Sin embargo su nivel dentro de la cancha, a pesar de las asistencias que ha dado, no ha sido al que nos tenía acostumbrados en su mejor momento, quedando exhibido en múltiples ocasiones, por temas también de su edad.
Eso es algo completamente normal y que a todos les pasa, el problema es que para muchos, Miguel ha pecado en más de una ocasión de querer ser protagonista de más. Esto pudo quedar de manifiesto cuando no le quiso ceder un penal a Jürgen Damm en los cuartos de final contra Puebla, donde nada le costaba cedérselo, a un jugador que casi no ha tenido minutos con el equipo y quería un momento especial con la afición, pudo más el deseo de Layún, de tener ese momento para él mismo.
Aunque esto pudo ser un simple evento aislado, en varias ocasiones Layún se ha encarado con aficionados en Redes Sociales, algo que en lugar de arreglar la situación, lo ha alejado aún más de la afición americanista. Es cierto que hay un sector que suele ser demasiado severo y crítico con todo lo que hace el veterano futbolista, pero él tampoco ha ayudado mucho a mejorar la tensión entre él y la tribuna.
Personalmente yo siempre le tendré un cariño especial por los momentos que se vivieron con él, en el pasado, pero es una realidad, que la situación de Miguel Layún y la afición del Club América, es un claro ejemplo de la mítica frase de cierta película de Christopher Nolan: "O mueres como un héroe o vives lo suficiente para verte convertido en un villano".
Esta columna es una opinión del redactor y no refleja la postura de Pasión Águila.