A pesar de que el Club América ya anunció la incorporación de dos elementos a sus filas, ninguno cumple con los requisitos que Santiago Solari lleva pidiendo desde el inicio del certamen anterior. Ciertamente, Diego Valdés llega a revolucionar la ofensiva de las Águilas, mientras que Jonathan dos Santos generará mayor competencia en la media de contención. Sin embargo, el Director Técnico argentino quiere un extremo por derecha que funja en la posición naturalmente, pues ya se cansó de rellenar el espacio con otros futbolistas que no terminan de encontrarse en esa zona. Recientemente, ha trascendido que las Águilas tendrían una nueva opción en mente.
Según reportó el sitio Águilas Monumental, la directiva encabezada por Santiago Baños ya considera la contratación de Joaquín Montecinos, jugador chileno cuyo fuerte es la explosividad al frente con velocidad y agilidad. El actual futbolista del Audax Italiano ha llamado la atención de Cruz Azul Futbol Club y Rayados de Monterrey, instituciones de las que se sabe, hay interés pero no ofertas sobre la mesa. De esta manera, América podría entablar un trato directo para hacerse de Montecinos.
En el semestre pasado, Montecinos participó en el 69% de minutos posibles repartidos en 28 partidos, donde encontró las redes rivales en siente ocasiones y repartió cinco asistencias, números que lo hicieron destacar como uno de los mejores extremos de la Liga Chilena. Joaquín tiene contrato hasta finales del 2025, por lo que cualquier equipo de la Liga MX que quiera contratarlo deberá pagar su cláusula de recisión.
El refuerzo que Santiago Solari quiere para el Club América
Con la salida de Renato Ibarra, las Águilas se quedaron sin un extremo por derecha natural, pues aunque el ecuatoriano parecía una opción idónea para desempeñarse como Solari quiere, su lesión y situación personal lo llevaron a alejarse nuevamente de Coapa, a pesar de ser de los mejores en su posición dentro de la Primera División Mexicana. Ahora parece ser que se buscará un atacante con estas características en el mercado sudamericano, misión que parece complicada considerando que el periodo invernal no hay tanto tiempo para negociar como en el verano.