El tema de Renato Ibarra ha sido por demás complicado para el América, pues una situación extracancha y en la que el Club nada podría hacer terminó afectando la planeación deportiva y económica. Ahora, meses después del incidente, diversas circunstancias harían que el ecuatoriano vuelva a jugar con la camiseta de las Águilas, algo que se pensaba que no volvería a suceder, aunque eso sí, la directiva fue muy clara y no está dispuesta a tolerar la más mínima afectación a la imagen del Club.
Si bien Renato nunca fue un jugador particularmente agresivo o sucio en la cancha, sí fue condicionado ante la más mínima muestra de violencia tanto en la cancha como fuera de ella, por lo que, según el periodista Rubén Rodríguez de Fox Sports, a la primera indisciplina, acto de violencia familiar o cualquier acción que pueda manchar la imagen de las Águilas, será dado de baja de inmediato, condición que Ibarra aceptó, además por supuesto de seguir en terapias y pláticas de concientización sobre la violencia a las mujeres.
El ecuatoriano será registrado debido a la lesión de Leo Suárez, quien juega precisamente como extremo por derecha, posición que Santiago Solari ya había pedido públicamente reforzar. Por lo tanto, tiene via libre en lo deportivo para ser titular indiscutible, quedando en él la posibilidad de ver minutos y volverse un incondicional del Indiecito.
Ibarra podría ver acción en el partido de esta noche ante Bravos de Juárez, por lo que sin duda los ojos del futbol mexicano estarán sobre ese partido, ya sea para hablar a favor o en contra, algo a lo que ya estamos acostumbrados los aficionados del América desde hace muchos años.
