SE TOMÓ UNOS DÍAS PARA RECARGAR PILAS

Cuauhtémoc Blanco se pone nuevamente la camiseta 

En varias ocasiones ha mencionado que no está contento con el trabajo que ha hecho Santiago Solari

Por
Escrito en NOTICIAS el

El futbol y la política comulgaron aún más en México al llegar Cuauhtémoc Blanco a puestos gubernamentales en el estado de Morelos y, después de disputar grandes encuentros en su carrera como americanista y seleccionado nacional, ahora también trata de dar su mejor esfuerzo en sus labores de funcionario y brindar lo mejor a la sociedad.

A poco más de tres años de tomar el cargo como gobernador institucional, los enemigos también han estado presentes en el camino; sin embargo, ha sabido sortearlos en el 'campo de batalla' y ahora que pidió un permiso especial de 15 días para ausentarse de sus funciones, no faltaron las voces que le recriminaron de supuestamente eludir sus responsabilidades y hacer una 'pausa' sin motivo de relevancia. 

No obstante, el ídolo azulcrema tiene derecho por ley a ausentarse 60 días si así lo dispone y dejar provisionalmente al secretario de gobierno en turno, que en este caso es Pablo Ojeda Cárdenas, rigiéndose en los terrenos de lo permitido y lo legal.

"Cuauhtémoc tiene muchos enemigos políticos que aún lloran que haya ganado la gubernatura y que los haya exhibido por sus malos manejos. Ahora tuvo el detalle de avisar que no estaría dos semanas por temas personales, que en sí fueron vacaciones con su familia, y está todo correcto. 

"El ex gobernador Graco Ramírez que está a punto de caer por corrupción, mueve sus piezas que aún tiene en la fiscalía para buscarle bronca. Tampoco supera que ya está en la mira de la FGR", señaló una fuente.

Este fin de semana, Blanco ya estará de nuevo en tierras morelenses y volverá a sus funciones de manera normal. Las pilas las tendrá más que reactivadas en cuanto a la política y en el futbol, ya en días anteriores había declarado que no le gustaba la permanencia de Santiago Solari en la dirección técnica de su amado América, a la vez de ilusionarse con ser presidente del equipo en un futuro no muy lejano.