En el último partido por la medalla de bronce, Diego Lainez salió con un esguince en el tobillo izquierdo que le impidió culminar el encuentro, el resultado en ese momento fue lo que importaba y aunque fue atendido no fue en ese instante cuando se percató de que no era una lesión menor, sino poco después que lo vio demasiado inflamado.
"Si ves el tobillo izquierdo ahí se me ve una bola, nunca lo había tenido tan hinchado", fue lo que comentó el mexicano en una entrevista realizada en su llegada al Real Betis después de sus vacaciones en la Ciudad de México. El canterano americanista podía caminar de manera regular a diferencia de como se vio al término del encuentro.
Para Diego fue complicado al ver que su lesión estaba tardando más de lo normal y señaló que fue uno de sus temores, ya que en ningún momento había tenido una lesión con tanta hinchazón, pero con la revisiones médicas por parte del equipo en Selección Mexicana logró mantenerse en la mejor condición para disfrutar su tiempo libre.
Lainez apuntó que aún le resta una o un par de semanas para mantenerse ya listo, aseguró que durante su paso por México tuvo la oportunidad de estar en constante rehabilitación en el Centro de Alto Rendimiento, por lo que ahora regresaba a España para darle fin a esa lesión y estar lo antes posible con el equipo de Manuel Pellegrini.