Guillermo Ochoa es uno de los máximos exponentes del Club América y la Selección Mexicana, no solo es un titular indiscutible en la cabaña de ambos combinados, sino que suele portar el gafete de capitán en símbolo del liderazgo y experiencia que consiguió a lo largo de su trayectoria. El arquero está cerca de acudir a su quinto Mundial, por lo que ha sido requerido para algunas entrevistas donde compartió su sentir.
Recientemente el elemento Azulcrema habló para la revista Caras, donde destacó que ser capitán implica responsabilidad mayor porque se debe tener respaldo del resto de la plantilla al mismo tiempo que se les da el ejemplo. Ochoa resaltó que los nervios son medulares y se debe calmar a los compañeros, pero depende mucho de la situación y los compañeros.
Ser el capitán lleva una responsabilidad extra porque necesitas ser el respaldo y el ejemplo de los demás. Tienes que calmar los nervios, tranquilizar a los jugadores y motivarlos. No es algo que se deba forzar, simplemente, las palabras me salen naturales cuando hablo con los chicos, porque salen del corazón, con base en las sensaciones y a las experiencias que estemos viviendo; a veces hay que despertar a la gente, aunque otras, hay que tranquilizarla, porque no todo son gritos ni regaños, se deben suavizar las cosas porque con la adrenalina que se vive en el futbol todo se exagera demasiado dentro de la cancha
La comprensión de Guillermo Ochoa con sus compañeros
Tanto en las Águilas como en el Tricolor, el cancerbero mexicano ha vivido momentos complicados, con lo que a aprendido que sus compañeros también tienen situaciones personales que pueden afectar su rendimiento, por lo que se debe saber mediar como parte del buen ambiente para que todo fluya dentro de la Selección Mexicana.
Igualmente, tratar de ser un mediador y entender que los jugadores más allá del futbol, llevan una vida personal y cada uno tiene cargas fuera de la cancha. Es parte de generar un buen ambiente en el equipo y que todo fluya para bien de la Selección.