Roger Martínez se ha convertido en uno de los jugadores más polémicos en la historia del América, llegando al grado de ser también uno de los más rechazados por parte de la propia afición. Las opciones para que el delantero colombiano salga han sido muchas y ha sido él quien las ha rechazado, aunque ahora no garantizó seguir en las Águilas, pues asegura que "quiere ser feliz".
El problema de Roger no solo en Coapa, sino en todos los equipos en los que ha estado, pasa más por su actitud que por su técnica. Por lo tanto, tras acabar el partido contra Juárez, donde anotó un gol, declaró que buscará su felicidad, sin asegurar si permanecerá o no en el cuadro azulcrema.
"Quiero jugar y ser feliz. Si me toca estar acá daré lo mejor y si no, se lo dejo a Dios que sabe todo y decidirá. Tengo mi cabeza acá, soy feliz y cada vez que trato hacer las cosas bien y quiero jugar más que nada".
El tiempo corre para el delantero colombiano, pues el 31 de enero se cierran los mercados en todo el mundo, quedándose sin posibilidades de salir del equipo por varios meses.
Santiago Solari, entrenador del América, no ha dudado en mandar a la banca a jugadores que no dan lo que él espera en la cancha, y si lo hizo con elementos de la talla de Marcelo o Isco en el Real Madrid, con más razón lo hará con Roger Martínez.