Las Águilas han tenido ya un buen rato en la novela de Roger Martínez, quien luego de declarar que quería salir del club para irse a Europa, fue congelado por los más altos mandos azulcremas. Durante el periodo de fichajes de invierno no hubo ningún equipo europeo interesado formalmente en él, pero sí en la MLS: el recién creado Inter de Miami.

Si bien el América y el Miami sí llegaron a un acuerdo por los derechos de Roger, al final el delantero colombiano pidió una cantidad de sueldo bastante alta, lo que hizo que los directivos estadounidenses pensaran dos veces esta situación. Esto terminó en que no hubiera acuerdo por él, aunque ahora su representante intenta lavarse las manos, asegurando que nunca hubo contactos con él ni con Roger.
"Nadie ha llamado nunca de Miami oficialmente. En consecuencia no hay comunicación con el futbolista y nunca hablamos".

Para bien o para mal, esto significa que, a menos que la directiva cambie de opinión, Martínez se quedará sin jugar lo que resta del semestre, lo cual pone en serio peligro sus aspiraciones de jugar la Copa América con su país, la cual se disputará este verano.