Tras los análisis de los último torneos en la era de Santiago Baños y Miguel Herrera, en Pasión Águila nos dimos a la tarea de crear un listado de los 5 peores refuerzos que han llegado al Club América en esta era.
Si bien se han conseguido dos títulos de Liga MX, una de Copa MX y uno de Campeón de Campeones el trabajo de algunos futbolistas en el terreno de juego ha dejado mucho que desear en los últimos torneos.
5 peores refuerzos en la era de Baños-Herrera
Santiago Cáseres
Su falta de precisión en los pases y el error cometido en la Semifinal de la Concachampions 2020 mantiene a Cáseres en este listado. Además no ha podido llenar el espacio que dejó Guido Rodríguez como contención. Su contrato terminaría este año, sin embargo, América buscaría su renovación.
Andrés Ibargüen
Es uno de los jugadores que nunca se pudo consolidar con el plantel de Coapa debido a las lesiones que sufrió a lo largo de su estancia, esto ha sido la principal razón por la que no ha encontrado constancia en el nido. Por ahora, ya no entra en los planes del club para el próximo torneo y es uno de los transferibles.
Giovani Dos Santos
Llegó como el jugador bomba, sin embargo, los estragos de las lesiones le han impedido demostrar el potencial que se veía en Selección Nacional. Es un jugador que no ha sentido el cariño por los colores azulcrema y que a pesar de los rumores de su salida no tiene preocupación alguna por retomar su lugar en el Nido.

Sergio Díaz
Este refuerzo paraguayo debutó en agosto y de ahí se le vio aparecer con la Sub20 en octubre de este año. En una ocasión fue exhibido por el propio Piojo Herrera al meterlo de cambio y sacarlo 30 minutos después. La participación de Díaz con el conjunto se resume a 98 minutos de juego repartidos en 5 juegos.
Roger Martínez
La falta de actitud en los encuentros importantes, mantiene al delantero en este apartado, las duras críticas que ha hecho la afición tras su titularidad en la Liga de Campeones de Concacaf, demuestran la apatía del futbolista por querer salir del equipo y su manera de demostrarlo ha sido su falta de intención futbolística en un equipo Grande de México.